¿Sabías que las mujeres somos el 40% de la fuerza laboral mundial, pero solo el 10% de las emprendedoras? ¡Es increíble! Y más aún cuando sabemos que las mujeres tenemos un gran potencial para crear negocios exitosos y transformar el mundo con nuestras ideas.
Pero no todo es color de rosa. Ser mujer y emprendedora es un doble desafío que implica enfrentarse a muchas dificultades y barreras que nos ponen las cosas más difíciles. ¿Quieres saber cuáles son? Te las cuento a continuación:
- Acceso a financiación: Este es uno de los mayores obstáculos que nos encontramos las mujeres a la hora de emprender. Conseguir dinero para iniciar o hacer crecer nuestro negocio no es nada fácil.
Los bancos, los inversores y las instituciones nos ponen más requisitos, nos ofrecen menos crédito y nos cobran más intereses que a los hombres. ¡Es una injusticia!
- Falta de referentes: Otra dificultad que tenemos las mujeres emprendedoras es la escasez de modelos a seguir que nos inspiren y nos guíen. La mayoría de las historias de éxito y de reconocimiento que vemos y escuchamos son de hombres, lo que hace que nos sintamos menos capaces y valoradas.
- Conciliación de la vida laboral y personal: Por último, pero no menos importante, está el reto de compaginar nuestro negocio con nuestra vida familiar y personal. Las mujeres seguimos asumiendo la mayor parte de las tareas domésticas y del cuidado de los hijos y las personas dependientes, lo que nos resta tiempo y energía para dedicarnos a nuestro proyecto. Además, la sociedad nos presiona para que seamos "supermujeres" que lo hagan todo bien y sin quejarse. ¡Es agotador!
Estas son solo algunas de las barreras que hemos tenido que superar las mujeres emprendedoras a lo largo de la historia y que todavía hoy nos siguen afectando.
Pero no nos rendimos. Al contrario, seguimos luchando, aprendiendo y creciendo, aportando nuestro talento y nuestra visión al desarrollo económico y social de nuestro entorno.
Por eso, desde este espacio que he llamado "UNA CHISPITA DE CONOCIMIENTO", quiero reconocer y apoyar el emprendimiento femenino, especialmente el de las esteticistas, que son unas profesionales maravillosas que nos hacen sentir más bellas y felices.
Quiero compartir con vosotras ejemplos de mujeres esteticistas que han creado enormes empresas a pesar de las dificultades de ser mujeres y que han triunfado en el mundo de la belleza. Quiero que veáis que es posible, que vosotras también podéis hacerlo, que no estáis solas y que juntas somos más fuertes.
¿Te animas a acompañarme en esta aventura? ¿Te gustaría conocer a estas mujeres extraordinarias y aprender de ellas? ¿Te apetece compartir tu propia experiencia o tus dudas como emprendedora? Si es así, te invito a que participes en este grupo, que es tu grupo, y que me dejes tus comentarios, tus preguntas y tus sugerencias.
Estoy deseando leerte y conocerte. ¡Vamos a darle una chispita de conocimiento a nuestro emprendimiento!
Rosa Diaz Tu Coach
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