¿Te
has preguntado alguna vez por qué algunas personas consiguen resultados y otras
no, aunque parezca que hacen lo mismo?
Yo lo hago continuamente y la cuestión es que,
aunque “parece” que hacen lo mismo, seguramente no es así. Entonces, ¿qué marca
la diferencia?
Yo le he estado dando vueltas a qué hago yo en mi Centro para tener resultados
y estas son las cosas que considero que han sido imprescindibles para llegar a
donde estoy hoy.
1.
Hago lo que tengo que hacer.
¿Qué quiero decir con esto? Que si tengo que estar dos horas escribiendo una
carta de ventas, lo estoy. Si tengo que dar una charla a la que me he comprometido,
la doy. Si tengo que aprender cómo vender mejor, aprendo.
Me escriben muchas personas diciéndome que no hacen algo bien porque “es que no
estoy motivada, es que no me apetece, es que estoy cansada” y un largo etc.
Cada una tiene sus circunstancias y prioridades, pero una cosa está
clara, si quieres que tu Centro de Estética) salga adelante tienes que hacer,
no solo pensar o planear, HACER).
Como escuché una vez decir a un gran mentor “Ni miedo, ni pereza, ni
vergüenza”.
Esa es mi actitud, muchas cosas me dan pereza, vergüenza y miedo, sí, pero si
tengo que hacerlo lo hago, y punto.
No me planteo si me da o no me da algo, lo hago.
Solo hay una excepción, cuando realmente no quiero
hacerlo porque no va conmigo, no concuerda con mis valores, por ejemplo, eso es
otra cosa.
Pero como siempre les digo a mis clientas, si te da vergüenza/miedo/pereza, te
aguantas.
Hacer en vez de pensar y planificar marca la diferencia. Y sí, todos somos
humanos y podemos flaquear algunas veces, no pasa nada, se acepta y se sigue
adelante.
2.
No hago las cosas al azar.
Que haga lo que tengo que hacer no significa que haga
cualquier cosa. Mis clientas saben que yo siempre hablo de seguir una
estrategia para todo.
Nada de levantarte y decir “a ver qué hago hoy”, así lo único que
consigues es perder el tiempo.
Siempre debes tener claro cuál es tu siguiente paso y esto sirve tanto para
negocios como para tu vida. Aquí es donde entra en juego la planificación,
saber en cada momento dónde estás y dónde quieres llegar, para poder decidir
qué movimiento es el más práctico en este momento.
Esto es especialmente importante porque estamos desbordados de información y si
no tienes claro qué tienes que hacer, acabarás perdida, ocupada con mil cosas,
pero sin hacer nada de verdad relevante o que saque adelante tu negocio.
3.
Mejoro cosas.
Siempre estoy experimentado y probando como mejorar
mis resultados, continuamente aprendiendo cosas útiles para mi negocio, no me
quedo estancada ni aunque me vaya bien.
Cuando tienes una estrategia y sabes dónde estás también sabes qué puedes
mejorar y te centras en eso.
Por supuesto hay etapas de menor actividad donde en vez de remar dejas
que te lleve la corriente, por así decirlo, pero solo para tomar un respiro.
También puede suceder que estés completamente satisfecha como estás y no
quieras crecer o cambiar nada, entonces perfecto sigues haciendo lo que
funciona mientras te vaya bien. Eso dependerá de tus objetivos y del tipo de
negocio que quieras.
No tienes por qué hacer lo que los demás están haciendo, puedes quedarte
como estás o puedes ir a por más, es tu decisión, lo importante es que estés
contenta con lo que haces.
4.
Me divierto.
Disfruto mucho con lo que hago en mi negocio, desde
hablar con mis clientas, hasta escribir artículos, o aprender como aumentar
porcentajes de conversión o a vender mejor. Me encanta.
Por supuesto, no todo me gusta, siempre hay alguna
parte que te gusta menos y es normal, que nadie piense que te tiene que gustar
absolutamente todo, eso no es real.
Para mí es imprescindible disfrutar con lo que hago, no tiene por qué ser
cierto para ti también, quizá para ti el trabajo es simplemente un medio para
conseguir otras cosas y está bien.
En mi caso disfrutar hace que no me canse, que persista
y, cómo no, cuando te gusta lo que haces, los demás también lo notan. No es lo
mismo.
No sólo eso, sino que también hago cosas que me divierten en mi tiempo libre,
actividades que, quién sabe, pueden ser una nueva fuente de ingresos en un
futuro. Como cuando me apunté al curso de coaching simplemente porque me
gustaba, por ejemplo, y mira donde estoy.
He hecho cursos de todo tipo por pura diversión y aprendizaje y seguiré
haciéndolos. Cuando cuidas tu desarrollo personal y disfrutas, también se nota
en la parte profesional.
5.
Invierto
Invierto continuamente en aprender a hacer las cosas
bien. Cómo hacer la web más eficiente, como mejorar las ventas, como hacer
lanzamientos, cómo atraer clientes y un largo etc.
Ya me cansé de dar vueltas e intentar hacerlo yo todo sola para
ahorrarme dinero.
Eso no funciona y cuanto antes lo aceptes, antes prosperarás. Mucha gente
quiere tenerlo todo sin invertir nada, lo siento, pero no funciona así.
En primer lugar, si tu no inviertes en nada por qué alguien va a invertir
en ti. No seas el tipo de cliente que no quieres para ti…
Para mi negocio, invertir en programas y mentores ha supuesto un antes y un
después en todos los aspectos, motivación, energía, resultados e ingresos.
Empieza con lo que puedas y ya sabes, si tienes un
negocio no te queda otra, es parte del juego.
Estos son mis cinco imprescindibles, y tu ¿Qué estás haciendo para salir
adelante? Cuéntame en los comentarios qué consideras tu imprescindible o con
cual de mis puntos te identificas más.
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